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¿Cómo estás? Por si es tu primera vez aquí, me presento: soy Iván Leal y te doy la bienvenida a Superfluor, una gaceta donde interconectar ideas y recursos de los que extraer inspiración. Puedes conocer en detalle su propósito y/o suscribirte (si no lo has hecho ya).
Y si ya eres habitual de Superfluor, gracias por volver. En las últimas semanas se han unido más personas curiosas a esta gaceta, y a tu manera has contribuido a que sea así. GRACIAS.
§0. Una reflexión sobre punzones, estilos y autoplagio.
Hace tiempo leí una anécdota sobre Alfred Hitchcock. Resulta que, en la cima de su carrera y erigido en su status como maestro del suspense, estaba hasta el moño de ciertas críticas sobre algunas técnicas de rodaje que usaba repetidamente en sus películas. En cierto momento, para defenderse y atajar estas críticas, acabó por decir: «El autoplagio es estilo» (Self-plagiarism is style).
Me quedé con la frase porque, en la simplicidad de estas cuatro palabras, veo mucha miga escondida. Tanta, que tengo más preguntas que ideas claras, pero a ver qué se puede extraer.
Hablamos de estilos de escribir, de vestir, de pintar, de estilos de música. Hablamos de la identidad de una marca, de identidades visuales, de identidades verbales, de identidades sonoras. Forma parte de mi trabajo (y de mi curiosidad) reflexionar sobre cosas como el estilo y siempre me gusta ir a la raíz, a ver qué encuentro.
La etimología de «estilo» remite al latín stilus, un pequeño punzón metálico con el que una persona podía ir grabando caracteres en tablillas cubiertas de cera. Del stilus como herramienta se traspasó al «estilo» como forma personal de escribir.
Esta raíz de la palabra me parece interesante porque me evoca una imagen: el estilo personal como un trazo labrado sobre una superficie lisa, un surco único e irrepetible, como los patrones de nuestras huellas digitales o el de nuestro iris. Aunque algunos estilos puedan acabar pareciéndose a otros en ciertos aspectos (y algunos ser «sospechosamente» similares), esencialmente nacen como algo único.
¿Por qué, cuando vemos un cuadro de El Greco, podemos decir: «eh, ese de ahí lo pintó El Greco»? ¿O al oír unos segundos de una canción sabemos que es de un determinado grupo o artista? A lo mejor no podemos decir o describir con precisión en qué detalles nos estamos fijando para poder asegurarlo. Entonces, ¿cómo podemos saberlo?
Pues básicamente porque El Greco, como cualquier artista, se va copiando a lo largo del tiempo, aunque no implica que sea un proceso consciente y voluntario. Su trazo se va haciendo perceptible y evidente a fuerza de repetirse una y otra vez. Su estilo se desarrolla al autoplagiarse,
Y Hitchcock, como artista inteligente y de enorme talento, llegó a la lucidez de esa simple frase.
Hitchcock se copiaba a sí mismo en sus técnicas, en la temática de sus películas, en la estructura narrativa, en los encuadres utilizados. Cada película que rodaba, cada decisión que tomaba dentro de una película y cada idea descartada, hacía más nítido su propio estilo.
En niveles elevados de virtuosismo, esta repetición y pulido constante se combina con ligeras variaciones que enriquecen el estilo y dan lugar a una «seña de identidad», a una huella de surcos profundos e irrepetibles. En este punto, la tarea de definir en qué consiste esa identidad no es de quien la posee, sino de quien la percibe.
Y esto me parece liberador, porque la idea del estilo como una autocopia nos exime de la fatiga que supone tratar de encontrar un estilo propio.
Ya lo tenemos, cada persona tiene el suyo. Solo hay que perfilarlo.
Tal vez no podamos describir cuál es nuestro estilo pero no tenemos necesidad de hacerlo. Los temas que nos atraen, la perspectiva con la que los miramos, las ideas que generamos, la manera en que las expresamos… todo se encarga por sí solo de entretejerse en una trama única. Cada decisión que tomamos o dejamos de tomar y cada palabra que escribimos va perfilando un trazo.
Puede que no sea muy reconocible.
Puede que no sea completamente original.
Pero es inevitablemente personal.
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Por cierto, aprovecho para contártelo: el concepto de la tabula rasa, de hacer borrón y cuenta nueva, está relacionado con el stilus. Si quien escribía se equivocaba o quería empezar de nuevo solo tenía que alisar con una espátula la tablilla de cera y volver a escribir.
Ojalá todo fuera así de fácil.
Esta pequeña reflexión lleva doble dedicatoria: a Chus Naharro, con la que tuve el placer de charlar a fondo de Superfluor en su podcast sobre newsletters, de estilos, formatos, identidades y otras cosas interesantes. Y también va dedicada a mi madre y a mi padre porque su apoyo es incondicional y es evidente con este mensaje sobre el podcast ❤️
Comparte este número con todas esas personas preocupadas por encontrar su propio estilo, o simplemente difúndelo para que vuele lejos. Gracias por hacer que #Superfluor llegue a muchas más personas curiosas.
§1. Una novedad importante
➼ PROGRAMA DE DISEÑO VERBAL
En el número anterior te decía que pronto tendría novedades que contarte, y me hace mucha ilusión comunicarte algo importante: el lanzamiento del Programa de Diseño Verbal que voy a dirigir en el Instituto Tramontana. Es un verdadero placer y lo asumo con cariño y responsabilidad. Quienes me conocéis sabéis mi vínculo con las palabras, por su capacidad para moldear el pensamiento y transformarse en mensajes con los que dirigimos, argumentamos, persuadimos o diseñamos.
El programa empieza en abril y está dirigido a personas que quieran reflexionar, analizar y extraer el poder del lenguaje para aplicarlo en su día a día: formular una estrategia, estructurar sus argumentos, definir requisitos, facilitar instrucciones... El objetivo es diseñar las palabras de manera que podamos pensar con mayor claridad y comunicar nuestras ideas con efectividad y precisión.
Puedes leer más sobre el enfoque del programa en la propia web, donde también tienes la inscripción. En breve estará disponible el dossier con más detalles. Si tienes curiosidad o dudas (o las dos cosas) me puedes escribir por Twitter o responder a este mismo correo y comentamos las preguntas que tengas. Si además quieres difundir o compartir este programa con personas que creas que le puede interesar, fantástico.
§2. Para estimular tu inspiración
➼ DESIGN MANIFESTOS
Un manifiesto es una pieza escrita en la que la palabra adquiere una de sus expresiones más poderosas. La declaración de principios e intenciones de ciertos documentos llega a formularse en mensajes de tal claridad y rotundidad que se convierten en referentes y catalizadores de cambios profundos. Design Manifestos es una librería de libre difusión en la que inspirarse con su colección de manifiestos del ámbito del diseño, de múltiples épocas y múltiples perspectivas.
➼ REDUCIR Y ABSTRAER, REDUCIR Y ABSTRAER…
…hasta que no quede nada más que la esencia de las cosas. Decir «no» a lo superfluo para llegar a lo que Picasso, en su serie litográfica «El Toro», denominaba «el espíritu de la bestia». Este es un hilo inspirador que conecta a Picasso con Steve Jobs para reflexionar sobre la innovación y la simplicidad.
➼ DESDE LOS ABISMOS DE INTERNET
Para mí, internet es como las arenas del desierto. Millones de ideas, palabras, imágenes, vídeos son constantemente engullidas y relegadas a las profundidades digitales para, en parte, nunca más volver a ser vistas o conocidas por una persona. Read Something Great es una plataforma en la que, como si fuera arqueología digital, rescatan artículos muy interesantes de temáticas diversas. Te permite además guardarlos para cuando quieras o puedas leerlos. Volver a una web del 2001 es como viajar siglos atrás y alucinar con cómo ha podido cambiar todo tan rápidamente.
§3. Para desvelar misterios ocultos
➼ EL ENIGMA DE LA CIGARRA
Como en el mundo real, el ámbito digital se ha ido poblando a lo largo el tiempo con sus propios misterios y leyendas. Uno de los más enigmáticos, y con diferencia, es el de Cicada 3301, que se ha considerado el enigma más elaborado y misterioso de la era de internet. Me imagino que esto es suficiente para estimular tu curiosidad, solo queda que quieras adentrarte en este misterio. Te he traído una pequeña serie documental para que puedas conocer esta historia increíble.
Gracias por llegar hasta aquí y gracias a todas las personas que apoyáis Superfluor. Si te gusta lo que lees y quieres comentar, compartir y difundir a los cuatro vientos... qué te voy a decir, sería genial. Suelo compartir más cosas en Twitter, por si te interesa. Nos vemos muy pronto.
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IMAGEN DE PORTADA: Central Press/Getty Images